Más allá del IMC: Una nueva perspectiva sobre la obesidad
Aunque se reconoce que el Índice de Masa Corporal (IMC) es útil como herramienta de filtrado para identificar a personas que podrían estar viviendo con obesidad, los autores recomiendan alejarse del diagnóstico de obesidad basado únicamente en el IMC. En su lugar, proponen confirmar el exceso de masa grasa (obesidad) y su distribución en el cuerpo mediante uno de los siguientes métodos:
- Al menos una medición del tamaño corporal (circunferencia de cintura, relación cintura-cadera o relación cintura-estatura) además del IMC.
-Al menos dos mediciones del tamaño corporal (circunferencia de cintura, relación cintura-cadera o relación cintura-estatura), independientemente del IMC.
-Medición directa de grasa corporal (por ejemplo, mediante un escaneo de densitometría ósea o DEXA), independientemente del IMC.
-En personas con IMC muy elevado (por ejemplo, >40 Kg/m²), el exceso de grasa corporal puede asumirse de manera pragmática.
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Dos nuevas categorías de obesidad: 'obesidad clínica' y 'obesidad preclínica'
La Comisión también propone un nuevo modelo para el diagnóstico de obesidad basado en medidas objetivas de enfermedad a nivel individual.
Obesidad clínica se define como una condición de obesidad asociada con signos objetivos y/o síntomas de reducción de la función de los órganos, o una capacidad significativamente reducida para realizar actividades cotidianas estándar, como bañarse, vestirse, comer y mantener la continencia, debido directamente al exceso de grasa corporal. Las personas con obesidad clínica deben ser consideradas como pacientes con una enfermedad crónica activa y deben recibir un manejo y tratamiento adecuados.
La Comisión establece 18 criterios diagnósticos para obesidad clínica en adultos y 13 criterios específicos para niños y adolescentes, que incluyen:
-Dificultad para respirar debido a los efectos de la obesidad en los pulmones
-Falla cardíaca inducido por la obesidad
-Dolor en las rodillas o caderas, con rigidez articular y reducción del rango de movimiento como efecto directo del exceso de grasa corporal sobre las articulaciones
-Ciertas alteraciones en los huesos y las articulaciones en niños y adolescentes que limitan el movimiento
-Otros signos y síntomas causados por la disfunción de otros órganos, incluyendo los riñones, las vías respiratorias superiores, los órganos metabólicos, el sistema nervioso, el sistema urinario y reproductivo, y el sistema linfático en las extremidades inferiores
La obesidad preclínica es una condición de obesidad con función orgánica normal. Las personas que viven con obesidad preclínica, por lo tanto, no tienen una enfermedad en curso, aunque tienen un riesgo variable pero generalmente elevado de desarrollar obesidad clínica y otras enfermedades no transmisibles (ENT) en el futuro, como la diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares, ciertos tipos de cáncer y enfermedades mentales, entre otras. Por lo tanto, deben recibir apoyo para reducir el riesgo de desarrollar posibles enfermedades.
Las personas con obesidad necesitan una atención personalizada
El replanteamiento de la obesidad que hace la Comisión está diseñado para asegurar que todas las personas que viven con obesidad reciban el asesoramiento sanitario adecuado y atención basada en evidencia cuando sea necesario, con diferentes estrategias para la obesidad clínica y la obesidad pre-clínica.
Las personas con obesidad clínica deben recibir tratamiento oportuno y basado en evidencia, con el objetivo de recuperar o mejorar completamente las funciones corporales reducidas por el exceso de grasa corporal, en lugar de centrarse únicamente en la pérdida de peso. El tipo de tratamiento y manejo para la obesidad clínica, ya sea mediante cambios en el estilo de vida, medicación, cirugía, etc., debe basarse en una evaluación individual de riesgos y beneficios, y determinarse a través de una discusión activa con el paciente.
Las aseguradoras de salud en todo el mundo a menudo requieren evidencia de otras condiciones asociadas con la obesidad (por ejemplo, diabetes tipo 2) para ofrecer cobertura de terapias para la obesidad. Como una enfermedad crónica distinta en sí misma, la obesidad clínica no debería requerir la presencia de otra enfermedad para justificar la cobertura.
Las personas que viven con obesidad pre-clínica están en riesgo de desarrollar enfermedades en el futuro, pero no presentan complicaciones de salud actuales debido al exceso de grasa corporal. En consecuencia, el enfoque para su atención debe centrarse en la reducción de riesgos. Dependiendo del nivel de riesgo individual, esto puede requerir solo asesoramiento de salud y monitoreo a lo largo del tiempo, o tratamiento activo si es necesario para reducir los niveles de riesgo sustancialmente altos.
"Este planteamiento detallado de la obesidad permitirá aplicar enfoques basados en evidencia y personalizados para la prevención, el manejo y el tratamiento en adultos y niños que viven con obesidad, lo que les permitirá recibir una atención más adecuada, proporcional a sus necesidades. Esto también ahorrará recursos en el sistema de salud al reducir la tasa de sobrediagnóstico y tratamientos innecesarios", dice la Comisionada Profesora Louise Baur, Universidad de Sydney (Australia).
La Comisión involucró a 56 expertos de renombre mundial en una amplia gama de especialidades médicas, incluyendo endocrinología, medicina interna, cirugía, biología, nutrición y salud pública, representando a numerosos países y diversos sistemas de atención médica. Además, la Comisión incluyó a personas que viven con obesidad y consideró específicamente el posible impacto de las nuevas definiciones de obesidad en el estigma generalizado en la sociedad.
"Los estudios demuestran que la forma en que se suele hablar de la obesidad contribuye al estigma relacionado con el peso, lo que dificulta su prevención, manejo y tratamiento. El enfoque propuesto por esta Comisión puede ayudar a aclarar conceptos erróneos y a reducir el estigma. También instamos a mejorar la formación del personal sanitario y de los responsables de políticas públicas para abordar este problema," señala Joe Nadglowski, defensor de pacientes y Comisionado de la Obesity Action Coalition (EUA).